Lo siento, por no ser lo que buscas en alguien, por llorarte buscando consuelo en mi almohada, y que ésta no sepa como dejarme vivir.
Lo siento, por haber vuelto creyendo que seguirías esperándome, por sentir que soy caos y tú me tranquilizarías.
Lo siento, por necesitar de ti como si acabase de nacer, y viese que el mundo se compone de tu risa.
Y aunque crea que empiezo a quererte, juraré no sobrepasar el límite de lo inalcanzable. Tú.
Lo siento, por hacer que la balanza cambie, y llevar todo el peso en mi conciencia.
Y si te vas, juraré echarte de menos como si fuese la última canción antes de morir.
Cuídate.
No hay comentarios:
Publicar un comentario